Salma Hayek es una de las actrices latinas que goza de mayor proyección mundial, tanto a nivel artístico como personal, convirtiéndose así en uno de los rostros más populares y por lo tanto en un referente de moda, algo que ocurre con la gran mayoría de famosas de su nivel. Cierto es que tiene todos los elementos necesarios para cumplir a la perfección con la fama que suele conllevar la belleza latina, aunque no siempre sabe utilizarlos a su favor.
En lo que a maquillaje se refiere, Salma tiene unos rasgos muy precisos y regulares que no necesitan de grandes trabajos artísticos para que se pueda mostrar guapa y atractiva. Yo más bien diría todo lo contrario ya que la veo mucho más favorecida con estilos naturales que cuando va maquillada con técnicas más complejas. En esos casos, todo resulta excesivo en ella ya que su rostro es menudo y destacarle mucho los ojos y los labios es un error.
En la imagen de la derecha podemos ver varios elementos que incurren en una mala técnica de estética. En primer lugar no muestra unas cejas limpias ni proporcionadas, eso provoca que te fijes más aún en sus ojos que en esta ocasión no están bien maquillados. Claramente se aprecia cómo la sombra gris se ha querido difuminar en el extremo del ojo pero el efecto que causa es más bien el de haberse corrido, así como el modo en que se le aplicó en el párpado móvil (semicírculo) sólo provoca más sensación de ojos hundidos.
En cuanto al pelo, me gusta muchísimo más de melena que de recogido puesto que este último la hace infinitamente mayor, aunque en esta ocasión fue peinada con muy poco acierto. Se puede ver que no se han cuidado detalles como la perfecta retirada de todo el nacimiento. Además, el prendedor que adorna la coleta resulta muy excesivo para acompañar esos pendientes, ya que siempre debemos arreglarnos pensando en el efecto global. Me quedo con el pelo suelto y el maquillaje nude de la izquierda, aunque en mi opinión ese escote estropea por completo su imagen.