Al igual que tu ropa no es la misma para cada momento del día, el maquillaje también puede variar según la ocasión que se presente. En este caso daremos las claves que te ayudarán a marcar la diferencia entre fantasía, atrevimiento o sofisticación. Después de aplicar la base que mejor se adecue a tu tipo de piel, los ojos y labios serán los protagonistas en cada una de estas tendencias.
– Fantasía: destaca unas pestañas de vértigo sobre una piel de porcelana. Largas, densas, voluminizadas a base de máscaras con colágeno, pero eso sí, sin grumos.
– Atrevimiento: atrévete a mezclar opuestos. Apuesta por una estética muy retro en la que tú misma eres el lienzo. Una mirada nada discreta, cargada de misterio con tríos de sombras sobre un mismo tono, mézclalo con negro. Labios sangre en mate pero con apariencia hidratada, aportarán el toque sensual.
– Sofistificación: dale el poder a tu mirada haciendo que tus ojos destaquen por sí solos. Perfila la línea superior de las pestañas por fuera con lápiz de ojos rojo, los harás intensos, misteriosos y penetrantes.
Tres estilos diferentes que podrás acompañar con peinados de fábula, donde tanto el volumen como las alturas serán el punto de referencia. Usa cualquier laca para dar ese efecto de altitud, pero cuando la compres fíjate bien en que puedas retirarla con un solo cepillado para que no tengas que machacar el cabello con varios cepillados. Alíate con espumas no apelmazantes que te ayudarán a marcar y sostener un pelo con vida y movimiento. Ayúdate de bucles, horquillas y todo tipo de tocados y diademas… 2011 es el año de la peluquería y el maquillaje. Un mundo de fantasía en el que sólo te queda elegir el aspecto que quieres mostrar en cada momento.