Aunque a veces no les otorgamos toda la importancia que merecen, las manos son una de las partes del cuerpo que más transmiten de las personas: No solamente son parte de nuestra carta de presentación sino que además son uno de los mayores focos de atención corporales probablemente a causa de su continuo movimiento.
Precisamente por eso debes comenzar a cuidarlas como si fueran uno de tus grandes tesoros si no quieres que pierdan su juventud y comiencen a deslucir. Tengas la edad que tengas, ¡pon ya en práctica todo lo que te contamos!
Manos
– Hidratación: Es la clave principal de unas manos bellas, y es que no hay nada peor que ver o rozar unas manos secas o ásperas. Lo único que debes hacer es llevar siempre en el bolso una pequeña crema de manos y aplicarla varias veces al día cuando tengas un minuto libre, y es que coger el hábito no te costará nada y tus manos realmente lo agradecerán.
– Imperfecciones: Si tienes pellejitos o padrastros no tomes la mala costumbre de estirajarlos con las uñas, pues no haces otra cosa que arrancarte la piel de forma salvaje. Retíralos o córtalos con delicadeza e intenta que no vuelvan a aparecer gracias a las cremas hidratantes.
– Productos: Protege tus manos de cualquier producto químico que pueda resultarle perjudicial. Ponte guantes a la hora de realizar las tareas de limpieza del hogar y evita los productos de higiene con ingredientes agresivos para la piel.
Uñas
– Prohibido morderlas: Unas uñas largas no tienen por qué ser sinónimo de unas uñas bonitas, pues la cortas también puden lucir preciosas en tus manos siempre y cuando no sea consecuencia del horrendo hábito de morderlas. Además de resultar completamente antiestético, puedes llegar a deformar uñas y dedos además de arriesgarte a algunas infecciones.
– Manicura: Unas uñas cuidadas y debidamente pintadas te darán un aspecto más elegante, formal y súper femenino. Las partes fundamentales de toda manicura son el cuidado de las cutículas, limar las uñas con la forma que más te guste y finalmente pintarlas.
– Productos: Cuidado con los cosméticos que compras, pues generalmente en este caso la calidad y el precio sí que van muy relacionados. Evita los tonos fuertes que destiñan sobre tus uñas robándoles su hermoso color natural y utiliza algunos productos fortificantes para que tus uñas crezcan más sanas y fuertes.