Casi todo el mundo tiene problemas con las uñas en algún momento de su vida, especialmente cuando se vuelven más frágiles, algo que puede pasar por diversos motivos. También están las personas que siempre tienen las uñas frágiles, siendo muy quebradizas y rompiéndose con mucha facilidad, lo que hace que sea muy difícil poder tenerlas siempre con un buen aspecto.
Las uñas se pueden volver frágiles por diferentes motivos, siendo el más común el utilizar limas pulidoras, las cuales las van haciendo más finas y sensibles, provocando que tengan muchas estrías y finalmente se rompan. La hidratación también es un problema que deriva en uñas frágiles, concretamente la falta de ella, así que debes tenerlas siempre hidratadas. También son propensas a tener las uñas frágiles las personas que pasan mucho tiempo en contacto con el agua o utilizando productos corrosivos, además de aquellas que no consumen muchas vitaminas.
Solucionar el problema
Hay varias cosas que puedes hacer para que tus uñas no sean tan frágiles, empezando por una alimentación sana y equilibrada que sea muy rica en vitaminas, calcio, frutas y verduras. No esperes milagros y pienses que en cuanto comas bien las uñas se fortalecen, necesitan un tiempo ya que comienzan a nacer fuertes pero no se fortalecen las que ya tienes.
También puedes optar por complejos vitamínicos que tengan propiedades que beneficien a tus uñas, como los que tienen vitamina B o aminoácidos lisina, cistina y triptofán. Estos complementos puedes encontrarlos en cualquier farmacia. Otra cosa que puedes utilizar son productos endurecedores, además de cremas hidratantes un par de veces al día para que no lleguen a deshidratarse. Es recomendable que cuando vayas a empezar con cualquier tratamiento fortalecedor te cortes las uñas cortitas para que puedan empezar a crecer sanas.