Si es cierto que la mirada es el espejo del alma más vale que cuidemos nuestros ojos por todos los medios posibles, ¿no crees?
En realidad bastaría con no cometer barbaridades que perjudiquen el aspecto o la sensibilidad de nuestros ojos. Sin embargo, puede que el problema sea que muchas de vosotras quizá no tengáis claro cómo debéis actuar para mantenerlos en perfecto estado.
En este artículo te contamos algunas de las claves, así que presta atención y comienza a seguir los mejores hábitos para tus ojos.
– Dada la sensibilidad de los ojos resulta imprescindible que te hagas con cosméticos de buena calidad que garanticen el respeto hacia ellos.
– Utiliza productos específicos para cada una de las zonas: cremas para prevenir y mejorar las patas de gallo, lociones para reducir ojeras y bolsas, aceite de ricino para el crecimiento de las pestañas, etc.
– La piel es muy delicada en esta zona, por lo que la aplicación de cualquiera de los anteriores debe realizarse mediante ligeros toquecitos o con suaves masajes sin ejercer demasiada presión ni estirar la piel.
– Refresca de vez en cuando tus ojos, pues con esa constante actividad diaria también lo necesitan. Una buena manera de hacerlo es empapando un algodón en agua muy fría con unas gotitas de agua de rosas para dejarlo reposar unos 5 minutos sobre los ojos.
– Utiliza gafas de sol para evitar fruncir el ceño y la piel del contorno de ojos, pues es uno de los principales causantes de las arrugas en esta zona.
– También puedes realizar ejercicios de gimnasia facial para prevenir arrugas o frenar la aparición de las mismas. Son fáciles y rápidos de hacer, ¡solo tienes que animarte!
Por último, mantener una dieta equilibrada y descansar bien es fundamental para reducir los efectos de unos ojos cansados marcados por la hinchazón, las ojeras o los párpados caídos… ¡Recuerda dormir 8 horas al día!