Ayer mismo te daba algunos consejos de belleza para evitar el cansancio y, de ese modo, conseguir que cada mañana tu rostro presente unos rasgos iluminados y relajados, algo fundamental para empezar tu jornada diaria con buena cara. Pero, si aún así consideras que tu imagen necesita una ayudita externa para mejorarla, hoy veremos cómo maquillarse para disimular ese cansancio.
Como siempre, debes empezar tu rutina de belleza limpiándote el cutis y aplicándote un tónico equilibrante. A partir de ahí, necesitarás concentrarte en la zona de los ojos, puesto que es ahí donde más se acumula el cansancio. Puedes aplicarte una ampolla flash por todo el rostro, y notarás cómo tu piel despierta de inmediato, mostrándose más tersa e iluminada, con una apariencia de 8 horas de sueño.
En su lugar, también puedes optar por un sérum específico para el contorno de los ojos, dependiendo de las necesidades que quieras cubrir: los hay para descongestionar bolsas y ojeras, así como también los tienes para reafirmar esa zona tan sensible, y créeme, hacen maravillas, sientes al momento su efecto tensor. Después de aplicarlo, no olvides ponerte tu crema hidratante habitual.
Para proceder a maquillarte, los ojos vuelven a ser los protagonistas. Puedes disimular el cansancio con un corrector de ojeras, pero procura que el color sea muy natural y que la textura sea fácil de extender, ya que no se trata sólo de tapar, sino de que no se note que has tapado. El corrector queda muy bien si lo vas extendiendo a pequeños toquecitos con las yemas de los dedos.
A continuación, maquíllate como de costumbre, pero teniendo mayor cuidado en las zonas que has disimulado previamente, puesto que podrías arrastrar producto sin querer. Como truquitos de persuasión, conviene que los días de “mala cara” te maquilles un poco más los labios y te peines de un modo que también disimule los párpados, o que llame la atención a otro punto que no sean los ojos.