Estar guapas va relacionado, en muchas ocasiones, con sentirnos bien, y para ello hay un consejo de belleza universal, que es la constancia. Por ello, a veces te comento que es muy importante que cada día te dediques unos minutitos a retocar algunos puntos de tu cuerpo, lo que ocurre, es que no todo el mundo lleva un ritmo de vida que se lo permita.
Por ejemplo, la ducha es un momento del día buenísimo para repasar los talones con piedra pómez, pero entiendo que las prisas convierten ese momento en unos minutos de higiene básica y nada más. Para recuperar el buen estado de tu cuerpo, te propongo que dediques un día a la semana que tengas libre (en muchos casos es el domingo), y aproveches para ponerte a punto de nuevo.
Si empiezas por la ducha, es un momento ideal para que te apliques una mascarilla reparadora en el pelo y la dejes actuar más tiempo del habitual, mientras tanto, es buen momento para que te realices una exfoliación corporal, de cuyos beneficios ya te hablé en otra ocasión. Ese tiempo en el agua, favorecerá que las uñas de manos y pies se ablanden, de modo que, al salir de la ducha, es un buen momento para cortarlas y repasar la manicura y pedicura.
Aprovechando que el vapor del agua te ha abierto los poros, puedes realizarte alguna pequeña extracción de puntos negros en tu cutis, si es que es tu caso, pero no olvides aplicarte luego un hielo envuelto para volver a cerrarlos, y completar esa limpieza con un tónico. Si estás recién depilada, puedes dedicar unos minutos a retirar con pinza los primeros pelitos que te estén saliendo, y así lograrás posponer la depilación algún tiempo más.
Por último, aprovecha que dispones de tiempo libre y aplícate las cremas faciales y corporales que utilizas habitualmente, pero realizando los masajes que proceden a cada caso. Verás cómo te sientes mucho mejor a lo largo de la semana.