Sólo faltan un par de semanas para que una de las noches más importantes del año tenga lugar: la Nochevieja, una de las fiestas que celebramos con mayor alegría y emoción, y por supuesto, dándolo todo en nuestra imagen para estar espectacular toda la noche. Los nervios empiezan a aflorar y queremos tener todos los cabos bien atados para poder disfrutar plenamente hasta altas horas de la madrugada.
Por lo general, el vestuario para esa noche suele ser el gran protagonista, y a partir de su elección, empezamos a diseñar la idea de lo que será el resultado general: el mejor peinado, maquillaje, la cartera de mano o bolso, las sandalias… y aquí es donde la mayoría de las mujeres encontramos un problema común puesto que solemos recurrir a altos tacones que luego no somos capaces de aguantar toda la noche.
En este sentido, yo te recomiendo que te realices una pedicura a fondo, mirando tanto el aspecto estético como el saludable. Por un lado, conviene llevar las uñitas de los pies perfectamente cortadas, y muy bien pintaditas, preferiblemente en tonos oscuros como los denominados “mora”, puesto que estilizan muchísimo. Puedes pintarlas 1 ó 2 días antes, y dejar que sequen bien, ya que no se estropean tanto como las de las manos, y esa misma mañana puedes darles una capita de brillo transparente para que parezcan recién arregladas.
La parte importante está en la planta del pie. Necesitamos estar completamente libres de durezas y otro tipo de irregularidades propensas a darnos grandes molestias, por lo que no estaría de más que, para esta ocasión tan especial acudieras a un profesional que te proporcionara el mejor estado para tus pies, y que gracias a ello no tengas que terminar, un año más, con los zapatos en la mano.