Grandes, pequeños, gruesos, finos… Las características de tus labios no son tan influyentes en su belleza como lo son los cuidados que les proporcionas, que los ayudarán a mantenerse siempre en un perfecto estado estético y de salud.
Sin embargo, la mayoría acostumbramos a proporcionar un papel secundario a nuestros labios que hace que raramente prestemos atención a sus cuidados. Si quieres unos labios sanos, jugosos e irresistibles atiende a los consejos que te dejamos en este artículo.
– Bálsamos y cacaos: Son un básico que debes llevar siempre en el bolso, pues además de proporcionar hidratación a la piel de los labios y protegerlos del frío, del viento y del calor de las calefacciones evitarán que te muerdas las pieles provocando heridas… ¡Su textura y gusto no suelen ser demasiado apetecibles!
– Protección solar: Ni se utiliza solamente en verano ni tampoco en exclusiva sobre la piel del rostro o el cuerpo. La superficie de los labios también debe ser protegida de los rayos perjudiciales del sol durante todo el año, lo que conseguirás con el uso de alguno de esos cacaos hidratantes con factor de protección.
– Exfoliación: Es una buena forma de eliminar de ellos las pieles muertas y levantadas. Puedes hacerlo en casa frotando delicadamente con un antiguo cepillo de dientes suave.
– Malos hábitos: A pesar de que a menudo los haces inconscientemente, algunas costumbres se convierten en malos hábitos que pueden perjudicarles. En este sentido debes evitar pasar la lengua por encima de ellos para evitar que la saliva los seque todavía más así como mordisquear las pieles levantadas de los labios para no crear heridas todavía más profundas sobre ellos.
– Agua: La hidratación también se trabaja desde dentro, así que no olvides que los expertos recomiendan tomar un mínimo de dos litros de agua al día para mantener la piel perfectamente nutrida y tersa.